miércoles, abril 05, 2006

Léon, el profesional

Mathilda es hija de una familia de dudosa catadura moral. Su padre, que trabaja para un policía corrupto, llamado Stanfield oculta un alijo de cocaína en su casa. Tras intentar engañar a Stanfield, este, acompañado por sus compañeros acaba con la familia al completo, a excepción de Mathilda, que en el ultimo momento consigue refugiarse en casa de su enigmático vecino, Léon. Sin embargo, Mathilda pronto descubre que su vecino es un "limpiador", un asesino a sueldo. Deseosa de vengar la muerte de su hermano pequeño, al único que verdaderamente sentía aprecio; Mathilda aprenderá los secretos del oficio, mientras su relación con Léon se va volviendo más cercana.
Léon es sin duda una de esas películas que con poco marketing, y escasa atención por la mayoría de los medios se convierte en una curiosidad digna de elogio por parte un sector de la audiencia. El film de Besson toca la fibra sensible, creando una historia conmovedora, gracias sobre todo a la interpretación de sus actores, más que a la historia, bastante previsible. Un frío y anónimo asesino cuya única preocupación es su planta, se va humanizando y preocupándose por alguien más que no sea él, mientras que su contrapartida femenina, una joven de 12 años, empieza a experimentar una fatal atracción hacia él. La historia empezó a coger forma casi de inmediato tras el éxito de Nikita. En aquella película de Besson, aparecía un asesino a sueldo llamado Victor, en él se inspiro el director para dar a luz la película que ahora nos ocupa. Como he comentado, lo mejor de la película es sin duda el trío protagonista, con unas interpretaciones realmente loables; Jean Reno interpreta a la perfección su papel de asesino frío y distante, que poco a poco va humanizándose, y a cometer errores que no habría cometido meses atrás. Gary Oldman, histriónico como siempre, en el papel de un desquiciado y despiadado policía corrupto. Pero quien se lleva los máximos honores es la jovencisima Natalie Portman, que asombra con una naturalidad y profesionalidad digna de elogio la interpretación de la joven Mathilda, en un papel complejo y de dudosa catadura moral. Si hay algo que echar en cara seria la conclusión, no el final propiamente dicho, sino la forma de acabarlo. Grupos SWAT de la policía entran a punta de fusil en la casa de Léon, con poca seriedad, los agentes ni siquiera llevan los distintivos obligatorios que los identifican como policías; y su entrada es poco sutil. Las escenas de acción no son muy numerosas, pero las pocas que hay son llevadas a cabo con efectividad y contundencia.
Pero incluso en medio de este caos de fuego y violencia, dos personas brillan conmovedoramente, Léon, un frío y solitario asesino y Mathilda, una solitaria y nada inocente niña.

Léon, el profesional (1994)
Léon
Director: Luc Besson
Guion: Luc Besson
Interpretes: Jean Reno (Léon), Natalie Portman (Mathilda), Gary Oldman (Stanfield)
Productora: Gaumont
Duración: 110 min
Nacionalidad: Francia / EE.UU.
9,5/10

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4 Comments:

Blogger octopusmagnificens said...

Muy buena película. Da mucha pena el final.

9:30 a. m.  
Blogger John Trent said...

Tantas y tantas buenas criticas que me han dado de esta pelicula y aun sigo sin verla. Es de esas pelis que tengo intencion de ver pero se va pasando...hasta que me lo recuerdan otra vez.

7:38 p. m.  
Blogger Matías Brasca said...

Sé que no tiene nada que ver con lo que estás hablando, pero te invito a leer algo de lo que escribo en mis diálogos sobre cine.

http://cafrunisticosydeliraciones.blogspot.com/2006/02/cafrunstico-1-vista.html

Se aceptan todo tipo de comentarios, insultos y amenazas. Gracias, y perdón por la molestia.

8:47 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Saludos.
El Profesional es una de esas películas que por lo que sea anidan en tu corazón etérnamente. Recuerdo haber visto un típico "Cómo se rodó" y al instante decidir ir a verla. Para ello arrastré a mi novia a la sala, cosa que no le hizo la más mínima ilusión, qué le vamos a hacer.
Pero a mí me enamoró la película.
Apoyo todo lo comentado. El argumento resulta previsible y los swaft son de chiste, ni siquiera llevan chaleco antibalas y los tumban como a patos de feria.
Hay escenas muy crueles, como el tiroteo en que se masacra a la familia (qué mala leche parodiar a Julia Roberts en la bañera de Prety Woman) y otras más bien de deja vu, como cuando León se lleva por delante a los gansters al principio en el típico pregenérico para que se vea su habilidad letal.
Lo que llega dentro es el reparto, un trío de lujo y yo añado a Dany Aiello.
Fue aquí donde me cautivó por siempre Natalie Portman. Su escena llorando y suplicando a León que la deje entrar, la diferencia entre la vida y la muerte, es simplemente magistral. O el estar en la escalera sangrando por la nariz y preguntar si la vida siempre es así de dura. Y su posterior carrera sólo ha mostrado a una magnífica actriz y sana persona que esperemos que no se tuerza jamás.
Creo honradamente que en Closer merecía el óscar pues se comía cruda a Cate Blanchet.

2:01 a. m.  

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